Es siempre recomendable adecuar tu espacio de trabajo a tus
necesidades para así no tener que comprometer el físico en ningún sentido. Para
que esta área sea amable con nosotros, al momento de equiparla tenemos que poner
atención a sus elementos, desde el escritorio, la silla, audífonos, computadora
o laptop, y también muy importante, la iluminación. El contar con un nivel de iluminación
adecuado es sumamente relevante para tus ojos, ya que esto evita tensiones en
la vista y cansancio ocular. A largo plazo, esto puede evitarnos varias visitas
al oculista. Es por ello por lo que se recomienda siempre tener una lámpara especial
para la zona de trabajo.
Las lámparas varían en dimensiones, estructura y tipo de
iluminación. La bombilla que poseen es la que determina cómo alumbrará el
espacio y también la temperatura que la lámpara genere. Bombillas hay halógenas,
fluorescentes e incandescentes. Así mismo, como se mencionó, las dimensiones de
la lámpara son importantes, ya que se debe procurar que el tamaño sea adecuado
para el escritorio y la altura del usuario, es decir, que la lámpara quede por
encima de la altitud de la cabeza. En cuanto a estructura, existen lámparas de
tronco fijo o aquellas que son de brazo flexible, las cuales te permiten acomodarlas
para una iluminación más certera en áreas específicas. Hablando del diseño, siempre
se recomienda optar por una estética que complemente la decoración de la zona
para así, crear un entorno equilibrado visualmente. Entre las marcas que
ofrecen distintos tipos de lámparas podemos mencionar a Redlemon y ACCO.